Señor Director:

Acierta su reciente editorial en resaltar ‘la falsa sensación de que lo peor ha pasado’ instalada en gran parte de la población por el último invierno, pues toda la evidencia científica de que disponemos indica que lo peor está por venir. Gobierno, legisladores, universidades, empresas y sociedad civil no podemos quedarnos atrapados en esa desaprensión colectiva que evanece el sentido de urgencia movilizador de una acción decidida.

El agua caída este año no puede detener ni retrasar el incipiente impulso alcanzado en la implementación de medidas en todos los ámbitos que nos permitan avanzar en la resiliencia hídrica de nuestra economía y ciudades: ahorro en el consumo, mitigación de mermas, adecuación de paisajes, nuevos embalses, explotación de acuíferos subterráneos, riego tecnificado y plantas desalinizadoras, para lo cual necesitamos urgente una estrategia y regulaciones que permitan su pilotaje, escalamiento, despliegue y adecuación en las distintas regiones del país.

Rafael Palacios
Vicepresidente ejecutivo Asociación Chilena de Desalinización (ACADES)

La Segunda