Diario Financiero

Las plantas que ya están operando son un ejemplo de cómo sacar partido al agua de mar. También son la guía para las que están en construcción, con inversiones importantes que benefeciarán a la minería y otras industrias.

Grandes perspectivas de crecimiento presentan las plantas de desalinización. Hoy la capacidad instalada es de 8.000 l/s, pero, con los proyectos que están en carpeta, la cifra podría triplicarse a 2032.

Así lo señala Arturo Errázuriz, director de la Asociación Chilena Desalinización (Acades).’Si bien la industria de la desalinización lleva más de cien años en el país, esperamos ver un importante crecimiento, ya que representa la fuente más segura de abastecimiento para distintos usos, principalmente en la minería, logrando descomprimir los posibles conflictos ambientales y sociales por el uso de agua continental’.

Errázuriz detalla que existen en operación y desarrollo más de 60 plantas de distintos tamaños, centradas fundamentalmente en la industria minera.

Un ejemplo, es el proyecto de Quebrada Blanca, fase 2, de Teck, que está en construcción, la cual captará aproximadamente mil litros por segundo y abastecerá la operación de cobre bajo el yacimiento de Quebrada Blanca, con una producción de 316.000 toneladas del mineral al año.

Jorge Castillo, socio de la Cámara Minera de Chile y director ejecutivo del Centro de Arbitraje y Mediación Minero, destaca el proyecto de Codelco de Distrito Norte, que suministrará de agua las divisiones Chuquicamata, Radomiro Tomic y Ministro Hales, que este año está en proceso de licitación para su construcción. La inversión de más de US$ 1.000 millones tendrá una capacidad de 1.956 l/s y permitirá a la estatal reducir en 60% el consumo de agua continental.

También está el proyecto

Aguas Marítimas, de CRAMSA, en la Región de Antofagasta.

Con una inversión de US$ 5 mil millones, éste llevará agua de mar a lugares donde no tienen para consumo humano e industrial, en Antofagasta, Sierra Gorda y Calama, con una planta desalinizadora con capacidad para 700.000 m3/día. Además, este proyecto permitirá la minería sostenible del cobre y litio, puesto que dispondrá de agua desalada proveniente del mar, destaca Hugo Lecaros, gerente de Asuntos Corporativos de la empresa: ‘Nos encontramos preparando la primera adenda, la que incorporará la profundización de información -requerida por la autoridad- y medidas trabajadas con las comunidades’.

Nicolás Calderón, gerente senior de Servicios de Sostenibilidad de EY, destaca el proyecto en construcción de la planta desalinizadora INCO, de Los Pelambres, la cual proyecta una inversión de US$ 1.300 millones y una capacidad de producción de 400 l/s de agua desalada, en la región de Coquimbo: ‘Una vez que entre en operación, beneficiará a toda la cuenca del Río Choapa, al no aumentar la presión sobre el uso de agua continental a partir del uso industrial minero’.

Ivo Radic, representante para Chile de Aladyr, valora los proyectos de Collahuasi (con capacidad de 1.050 l/s), Codelco División Norte (1680 l/s) y Los Pelambres (800 l/s). Dice que en el sector sanitario, en cambio, el proyecto más relevante en proceso de calificación ambiental es el de Aguas del Valle (1200 l/s).

Y agrega que en el mismo proceso o en etapas previas hay plantas multipropósito.

Plantas operando

Los especialistas comentan que las plantas desalinizadoras que están operando son un ejemplo de cómo se le puede sacar partido al agua de mar.

‘Hay varios casos interesantes, pero quizás es digno destacar el de la planta desalinizadora en Coloso (en Antofagasta), que abastece el 100% de agua para Escondida de BHP. Esta planta le permitió a la operación eliminar la extracción de agua continental de sus pozos en Monturaqui, aliviando la presión de disponibilidad de agua para un ecosistema tan sensible como el asociado a la cuenca del Salar de Atacama’, dice Calderón, de EY.

Waldo López, gerente de Desarrollo de Negocios de Acciona y socio Acades, destaca iniciativas para asegurar el consumo humano, como el caso de Aguas Antofagasta ‘quienes desde el año 2003 abastecen de agua potable a la ciudad de Antofagasta gracias a su planta desalinizadora, la primera en Latinoamérica construida para ese propósito’. También menciona la planta desalinizadora de Tocopilla, que desde 2020 abastece al 100% de la demanda de los 23 mil habitantes.